El lema de la Defensoría Penal Pública es "sin defensa no hay justicia". Aunque a muchos cuando la leemos nos causa risa, la verdad es que no deja de ser cierta. Hoy todos hablan del alarmante aumento de la delincuencia, y las víctimas se organizan en reuniones en plaza italia, donde ahí mismo son asaltadas. Se discute de que el gobierno a cargo no ha tomado las medidas, los oficialistas alegan que la oposición nunca ha cooperado, se plantea que se aumentará la dotación de carabineros, que se aplicaran penas más severas, incluso vuelve a surgir como la gran solución esa "genial" idea de la tercera es la vencida, que en vez de dar muestra de cierta evolución, no es otra cosa que la reformulación dado el mismo fundamento que la paleolítica ley del Talión.
Todo lo anterior es la punta del iceberg, la portada sensacionalista de una realidad muy distinta. Yo sé que suena cliché, y que tal vez mi experiencia ya puedo decir de años en la defensa de delincuentes me hace carecer de objetividad, pero creo firmemente que del debate esta muy miope. Empezar a dar palos de ciego intentado acertar con alguna medida que baje los números es un gasto de energía y dinero, porque sólo resultaría efectivo en el corto plazo. Así como el pase escolar gratis no es la solución de fondo para otorgar una educación de calidad, que todos los delitos sean castigados con penas más altas es lo mismo. Es "rating", es poner a cualquier mujer voluptuosa en un programa. Como en todo problema hay que encontrar el fondo, la raíz del porqué existe. En general se encontraran carencias y razones, y tal vez en algunos casos solo se encontrará desfachatez y ningún remordimiento. Sin embargo, creo que debe invertirse más que en medidas corto plazistas en una apuesta para el futuro, cárceles más dignas, medidas alternativas que resulten de verdad aptas para la rehabilitación, limpieza de antecedentes más expedita que aumente las posibilidades de reinsertarse en el mundo laboral.
Mientras todos se aprovechan del tema para tratar de hacerse ellos mismos publicidad, e incrementar sus egos, creo que es en el pasado donde podemos encontrar un signo que nos puede dar ciertas luces. Víctor Hugo dijo una vez que en la medida que hubieran más escuelas habrían menos cárceles, y en mi humilde opinión creo que algo de razón tiene.
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